FILOSOFIESTA

HACIA LA FILOSOFÍA DESDE LA DIVERSIÓN Y HACIA LA DIVERSIÓN DESDE LA FILOSOFÍA

¿Qué crees que hay en común entre tu y el bebé que aparece en la foto y que dicen que eres tú?

¿Cambia todo o permanece algo? ¿el qué? ¿Dónde está?

Visitas: 429

Respuestas a esta discusión

Esta claro que si miro al bebé pequeño que hay en la foto y me miro a mí la verdad es que poco parecido habrá. Si nos fijamos bien los ojitos serán los mismos, los rasgos faciales serán los mismo, pero realmente la diferencia que hay entre ese bebé tan guapo y yo es que somos la misma persona, el alma, la esencia o como queramos llamarlo, eso sigue ahí, y lo mismo que sigue ahí para mí sigue ahí para todos. Si os paráis a mirar una foto vuestra de cuando erais pequeños, lo primero que se os vendrá a la cabeza será algo tipo: este no soy yo, a mí me han cambiado. Si vamos viendo fotos de cuando teníamos un año o dos pensaremos algo como: ¿y dónde iba yo con esas pintas?, ¿cómo dejé a mi madre salir así a la calle?. Y si ya nos vamos acercando a la edad actual diremos algo así como: ahora si que estoy igual que cuando tenía 13 años y oirás a tu madre o a tu padre decirte: pues anda que no has cambiado desde entonces, sigues teniendo el mismo genio que cuando tenías esa edad pero has cambiado un montón.
Ahora si lo miramos desde un punto de vista más filosófico y menos "familiar" por decirlo de alguna forma, diremos que en esencia seguimos siendo lo mismo, que hemos madurado, hemos cogido ideas de las cuales algunas son nuestras y otras no pero ese no es el caso. En cuanto a los sentimientos hemos cambiado un montón porque te paras y piensas, que a ti antes te daba igual que un chaval que te conoce te dijera hola o no, no sabes explicar porque ves a un chico y ya no sientes los sentimientos de amistad que sentías antes, y como no el tema de las amistades, en este ámbito empiezas a darte cuenta de que no todo es lo que parece, que quien creías que es tu amigo ahora sale y no te llama, habla de ti a tus espaldas... En mi opinión por una parte es la edad de las decepciones, comienzas a sufrir por todo, por la más mínima cosa tienes ganas de llorar y te das cuentas de que tienes una revolución de hormonas montadas en tu cuerpo que no sabes ya ni que hacer.
Por otra parte es una edad en la que aunque pierdes amistades, te das cuenta de quienes están ahí de verdad, empiezas a diferenciar entre lo que son compañeros y lo que son amigos de verdad. Además te das cuenta de que los mejor amigos que vas a poder tener nunca son tus padres y te alegras de darte cuenta porque encuentras en ellos un apoyo que no encuentras en nadie y poco a poco vas madurando. Ah por cierto, te das cuenta de que madurar no es ser una persona seria, si no que te das cuenta de que madurar es saber estar en cada momento y cada lugar, combinar esa "seriedad" con las tonterías que puedes hacer, y es bueno aclarar esto porque muchísimas personas se creen que madurar es ser una persona seria siempre y una persona que no sabe divertirse, una persona que no sabe hacer locuras y desde mi punto de vista si locura es dv
divertirse, las mejores personas están locas, porque donde se ponga una persona que sea seria cuando hay que serlo, que te ayude cuando te haga falta y que haga contigo el tonto hasta el fin de tus días y que "este loca" que se quiten las demás personas.
Así que como conclusión final y cierre de mi pregunta diré, que lo que hay de parecido en el bebé de la foto y mi yo actual es sencillamente que somos la misma persona, que puede que mi pensamiento haya cambiado, que mi físico haya cambiado y que todo mi alrededor haya cambiado pero lo que soy un esencia ni ha cambiado, ni cambiará nunca.

En la foto de mi salón hay una foto que mi mamá dice que soy yo cuando era pequeña, la veo y me imagino situaciones que recuerdo con dificultad y pongo esa cara a mis recuerdos, pero pienso y digo ¿realmente lo que soy ahora es lo que era antes?  Creo que las personas con el tiempo no tienen nada que ver cuando somos pequeños, cuando dependemos de alguien que esté todo el día pendiente de lo que hacemos y de lo que necesitamos, ahora son tiempos de que quieras ser independiente, que quieres hacer las cosas por tu propia cuenta sin tener que las cosas que hagamos sean totalmente controladas. Con la edad que tenemos queremos ser más libres, que las cosas que hagamos no se comparen con las que solíamos hacer de pequeños, cuando tenía dos años al ser hija única todo el mundo estaba pendiente de mi, mi abuela, mis tías, mi padre y mi madre y a veces me sobreprotegían por que era la más pequeña y todos querían tenerme en brazos y no me dejaban hacer nada, esto con el tiempo ha ido cambiando mis padres me han enseñado que no se debe depender de nadie, ya que tendrán que enfrentarte a muchas cosas durante toda tu vida y esas personas que de pequeña me sobreprotegían ya no estarán ahí para hacerlo, por eso desde ahora tenemos que aprender a saber llevar las cosas a nuestra manera y de la mejor forma posible, llevando una vida normal y siguiendo los valores que te han implantado a lo largo de tu vida.

Cuando somos pequeños somos inmunes a las cosas que suceden a nuestro alrededor hasta que llega un día en el que te das cuenta de todo lo que pasa y ahí es cuando de verdad empiezas a crecer, mientras tanto tus padres te sobreprotegen y no tienes que preocuparte de nada. Pero la persona que ves en esa foto que hay en tu salón es la misma persona que eres ahora, con esta edad ya aprendes de las cosas malas y disfrutas las buenas, vivir la vida consiste en ser feliz siendo tu mismo sin pensar en lo que puede privarte esa felicidad, tienes que ser tu mismo sin intentar imitar a nadie,  ser una persona de la cual se sientan orgullosa aquellos que te protegieron de pequeño, que  se alegren de que esos cuidados sirvieron para darte aliento de seguir, de que esos mimos que te dieron te hicieron una persona de bien y siempre puedes aprender muchas cosas de esas personas, al igual que pueden hacerlo de ti.

La persona que eras de bebe tiene que ser una persona de bien, tener sus metas bien marcadas y saber que ese pequeño que está rodeado de juguetes que sonríe como nadie, tiene que seguir dentro de ti y nunca olvidarte de tus valores como persona. Seguir creyendo en los sueños que te formulaste de pequeño aunque ahora sean de otra perspectiva que sientas que ese niño aun ríe, llora, juega dentro de ti, nunca dejes de pensar en lo que te inculcaron de pequeño ten en cuenta todas la riñas que te hacían cuando hacías las cosas mal, cuando te felicitaba cuando hacías algo en casa y te daban un beso diciéndote ‘Que bien cariño’ y todo eso siempre hay que tenerlo presente y saber hacerlo igual cuando formes tu familia y vuelvas a ver reflejado en ti a esa criatura que llevará tu misma sangre y a veces te recuerda a esa foto que viste aquel día en el salón de tu casa.

Estoy orgullosa de hacer nacido donde he nacido, y haber vivido con todos lo que me protegían cuando apenas podía defenderme, cuando no tenía razón de las cosas que me rodeaban, siempre le daré las gracias a esas personas por haberme criado así en ese ambiente y con todo lo que siempre me han contado.

Esta pregunta me parece muy interesante, y a la vez bonita. Digo esto porque cuando eres tan pequeño, no tienes preocupaciones, ni responsabilidades, tus padres te lo dan todo hecho, te lo pasas bien… Realmente es una etapa de felicidad, por así decirlo, aunque se esté en la ignorancia.

 A la pregunta, ¿Qué te hace ser hoy la misma persona que fuiste hace 15 años? Hace 15 años, tenía un año, bueno, más bien tenía dos. Intento acordarme de aquellos tiempos, pero mi memoria no alcanza. Para contestar a esto me ha surgido la necesidad de coger un álbum de fotos con fotos mías de pequeña y observarlas detenidamente. Me pongo a comparar esa niña rubia, pequeña, con ojos brillosos y una sonrisa en la cara, con lo que soy ahora mismo, y me da nostalgia de pensar en lo rápido que ha pasado el tiempo, pero  a la vez me da alegría de ver lo feliz que era, de la inocencia que tenía y de todo lo que he progresado a  lo largo de mi vida. Ahora mismo pienso que muy pocas cosas me hacen ser la misma persona. Todo en mí ha cambiado. Me pregunto cómo mi físico ha podido cambiar tanto y llegar a ser tan distinto, los rasgos faciales y la forma de mi cuerpo son muy distintos, aunque si es verdad que en el fondo se ve que soy yo de pequeña. A pesar de que haya cambiado mi físico, en mi siguen estando esos matices y esas pequeñas cosas que me hacen única físicamente. Al igual que con el físico, me pregunto cómo era mi forma de ser y cómo actuaba. Les podría preguntar a mis padres pero seguro que esa niña pequeña es distinta a lo que soy ahora. He vivido muchas experiencias de las que he aprendido mucho, he sido educada y formada académicamente, he madurado, mis sentimientos han cambiado, ahora tengo la suficiente capacidad para decidir por mí misma, elegir a mis amigos, mostrar mis opiniones y mis sentimientos, llegar a la conclusión de lo que realmente quiero… Por todas estas cosas y otras muchas más, está claro que en mí ha habido un progreso personal muy grande. Así que desde el punto de vista de forma de ser y de apariencia física, no soy la misma persona que hace 15 años.

Por otro lado, a la pregunta, ¿Existe realmente un tú individual que ha persistido en ti todo este tiempo? He de decir que sí. Aunque haya cambiado físicamente como explicaba antes, y aunque también mi forma de ser haya cambiado, pienso que mi esencia o mi alma, con las que nací y con las que voy a morir, siempre van a ser las mismas. Con esto me refiero, a que pienso que aunque las circunstancias que me rodean me cambien y realmente me formen como persona, siempre va a haber en mí cosas innatas y cosas heredadas por genética. Por ejemplo, algo que recuerdo de cuando era pequeña es que no me gustaba ir a la guardería porque realmente o veía absurdo, yo me lo pasaba mil veces mejor en mi casa con mi abuela. Hoy día, me sigue pasando eso, no quiero estar en ningún sitio si no le veo un buen fin o estoy a gusto. Otras cosas que me caracterizan desde que era pequeña, es que como poco, duermo mucho, soy muy seria con las personas que no conozco bien, etc. También, hay cosas que he heredado por genética. Por ejemplo, físicamente he heredado la mayoría de los rasgos faciales de mi padre, el pelo fino y claro de mi padre, los ojos de mi madre, el color de la piel de mi abuela, la forma del cuerpo de mi otra abuela, etc. Pero también he heredado genéticamente otras cosas que no son físicas, sino de forma de ser. Por ejemplo, he heredado la tranquilidad de mi padre, el carácter de mi madre, la alegría de mi madre, etc.

Juntando todas estas cosas que explicado me he formado yo, como persona. Y me alegra que en el fondo siga siendo la misma, con las mismas características que me definían desde que nací. Y que a la vez, haya progresado satisfactoriamente como persona.

Moira MacTaggert.

Lo común que hay entre ese niño y la persona que soy hoy, es el color de piel, una sonrisa, aunque no se la causa, hay una educación que nunca ha cambiado, hay una familia y bastantes sueños en la cabezas que aún estamos en caminos de encontrarlo, aún seguimos persiguiéndolos, pero primero empecemos por la diferencias para llegar hasta las similitudes, como diferencia, hay otro país un precioso país, con sus ventajas e o inconveniente como todos, pero país donde he crecido y donde me siento de el, pues ya son más año aquí que donde realmente nací, un país que me he encontrado personas que me han enseñado a crecer como persona, a ser más humano, donde se encuentran mis mejores amigos y los miembros más importante de mi familia, como diferencia también la edad, pues son 11 años mas desde la ultima ves que estuve corriendo por las calles de mi país, edad que al aumentar, aumento las dificultades de vivir en una sociedad de la cual no comparto muchos principios, pero si no puedes con tu enemigos, a veces debes unirte a ellos, unos años que han cambiado el aspecto físico, bueno el tamaño no mucho, aún sigo siendo un enano, la gran diferencia es a los sentimientos e inocencia de mi edad, ahora dado a mis experiencia en mi corta vida, soy más frio, tal ves más duro en apariencias, pues los años pasan, la vida pasa y nada pasa, yo sigo con fuerza, de ese niño ya no queda la ignorancia del mañana ahora hay una persona que piensa en el futuro en lo que quiere ser, en lo que quiere, en hacer feliz a los demás y se olvida de el, ese niño no tenia a su madre cerca y ahora no hay dia que no tenga la suerte de verla, tengo un hermano más pequeño que es la viva imagen de mi infancia, mucho ha cambiado ese niño o tal vez no...

Aun queda ese niño con ilusión, ganas y empeño en todo lo que hace, queda ese niño, que si se equivoca pedía perdón, fiel a sus amigos, desde pequeño comprometido con el valor de la amistad, queda ese niño que viene de un país que donde se caen se levantan, un niño generoso que intentaba ayudar a la gente que tenia menos que el, aun queda ese niño que se cabrea cuando algo le sale mal, que es radical con sus pensamiento y que cuesta reconocer que no puede hacer algo y si no consigue nada no muere sin intentarlo, un niño que creció sin un padre y un presente que aún le añora, un consejo, un abrazo, un apoyo, el mismo niño que supo que desde el cielo siempre le cuida y protege.

Ese niño que amaba al deporte y que hoy puede disfrutar de enseñar todo lo que le han enseñado, de los sacrificios que conlleva la victoria y que es bueno saber perder, es avanzar siempre hacia el saber, el niño que le encantaba bailar y aún lo sigue haciendo, que cantaba realmente mal y que con el paso del tiempo ha empeorado, ese niño que se enamoraba con facilidad, aún persiste aunque ahora existan pequeñas cosas que le enamoren.

Ahora entro en esas cosas que quiero que siga teniendo mi persona cuando siga haciéndome mayor si Dios me da esa oportunidad, quiero seguir teniendo los valores de mi madre, la presencia de mi progenitor, las ganas de conseguir las cosas, de persistir, de tener presente que vengo de un lugar donde decían que triunfar era imposible y que los pasos que de sean realmente para avanzar para retroceder siempre habrá tiempo, el niño que creció con su hermano mediano, que dormía con el en su habitación y que lo protegía siempre de los peligros, quiero seguir manteniendo ese amor por los míos el protegerles lo que le falte a ello me faltara a mi, que persista las ganas de crecer de realizarme como persona en aspectos humanos, en sentirme bien conmigo mismo en no buscar la felicidad en disfrutarla en su pequeñas secuencias.

RSS

Fotos

  • Añadir fotos
  • Ver todos

FILOSOFIESTA MÓVIL

Miembros

© 2024   Creado por Fernando López Acosta.   Tecnología de

Emblemas  |  Reportar un problema  |  Términos de servicio