FILOSOFIESTA

HACIA LA FILOSOFÍA DESDE LA DIVERSIÓN Y HACIA LA DIVERSIÓN DESDE LA FILOSOFÍA

Es todo imaginado ¿o no?. Se trata de que imaginemos que el mundo acabará en 20 minutos. Que esperemos pacientes la llegada del gran momento. Porque el gran moment podría realmente llegar. ¿o no?. No sentamos y esperamos. Contamos el tiempo. No hace falta despedirse de nadie porque no va a pasar nada ¿o sí?

Visitas: 1221

Respuestas a esta discusión

Esta experiencia me parece muy interesante de hacer y contar aquí. Cuando vi esta experiencia me llamó mucho la atención, porque nunca me lo había planteado pero cuando empecé a pensar en lo que haría si el mundo acabase de verdad en veinte minutos, reflexioné sobre lo último que haría, diría, pensaría, con quién hablaría y con quién no…

Empecé a imaginarlo y yo creo que después de saberlo, los primeros cinco minutos empezaría a aprovecharlos de inmediato y  comenzaría a avisar a toda mi familia y amigos, a toda mi gente para comunicarle lo que va a ocurrir y estar juntos todos y despedirnos, llevándonos de cualquier persona un recuerdo bonito de cada uno de ellos y poder irme en paz sin remordimientos. Los quince minutos restantes, que supongo que quedarían, estaría junto a ellos, todos reunidos, pegados, nerviosos, juntos… preparándonos cada uno a su manera para lo que viene. Creo que en mi mente empezaría a imaginarme en plenitud con mi misma, intentando pensar en otra cosa y en tranquilizarme. Me aislaría en un monte donde la naturaleza me rodearía por todas partes. Me tumbaría en la hierba, abriría mis brazos y me pondría a sentir cada sonido, cada brisa, a sentir mi respiración como si del último suspiro de oxígeno se tratara…a sentir cada cosa que ocurriera alrededor mío como nunca me he puesto ha hacer. Esa tranquilidad de estar en sintonía con el mundo que te rodea no la cambiaría por nada. Ese silencio a mi alrededor, alejada de lo humano que me estresaría.

Por supuesto, no contaría el tiempo porque sino me pondría histérica y pondría histéricos a los demás la verdad. Me quedaría yo y mis pensamientos en esa colina imaginaria reflexionando sobre la vida, mi vida y en lo que he hecho para ser feliz y cerraría los ojos para no presenciar el nerviosismo de los demás expresado de distinta forma cada uno pero expresado. También pensaría en la gente que no ha podido cumplir sus sueños, también en esos niños que no han crecido y que les han quedado toda una vida por delante, en esas madres que no los han visto crecer y en los que no han nacido y no van a tener su oportunidad de conocer lo que es vivir y tener una vida.

Con toda mi familia entera, esperaría los últimos minutos, algún que otro llanto de desesperación, además de cada latido fuerte de nuestro corazón latiendo impaciente en nosotros.

Los últimos segundos. Impaciencia, nerviosismo, todos juntos y agarrados esperando el fin. Tres, dos, uno… abro los ojos y espero. Podrían ocurrir dos cosas. Una sería que no pasa nada, todo ha sido una equivocación y no ha ocurrido nada de nada. Todos nos reímos y nos relajamos por fin, pero nunca olvidaremos lo que sentimos, esa sensación de estar tan cerca del final no se olvida fácilmente la verdad.

Y otra alternativa a la primera sería que fuera verdad y el mundo comenzara a destruirse y la gente corriera. Terremotos, meteoritos… mundo en caos. La gente loca perdida yéndose a lugares altos con sus familias ante la caída de meteoritos. Los informativos dando noticias de lo que ocurre en otros lugares del  mundo. Un mundo que va a destruirse sumido en el caos.

Y es que yo creo que a veces deberíamos pensarlo y fijarnos en lo que perderíamos y echaríamos de menos, porque a veces no valoramos del todo cosas que tienes y que no las valoras todo lo que se merecen hasta que las pierdes y te arrepientes de no haberte dado cuenta. Por eso pienso que debemos valorar al máximo todo lo que tenemos porque al fin y al cabo seríamos más felices y viviríamos mejor con nosotros mismos y con los demás por eso te digo, vive cada día como si fuese el último que nunca sabes lo que puede ocurrir y en segundos puede cambiar todo lo que tienes.

HACER QUE EL MUNDO DURE 20 MINUTOS

 

Mi profesor de filosofía de primero de bachiller nos ha puesto a elegir varias experiencias, preguntas y cartas para que escojamos, según él, la más complicada para nosotros.Es lo que yo he intentado hacer, elegir la mas complicada.Lo peor es, que me esta costando mucho hacerlas por su complejidad.Pero bueno, ahora voy a hacer esta experiencia que requiere el mayor realismo posible.Espero que salga bien.

 

Era el mes de Diciembre de 2012.Durante todo el verano ,Octubre y Noviembre habían sucedido muchos terremotos de gran escala y muchos fenómenos naturales que antes no habían sucedido con tanta agritud,en todo el mundo.Todos habíamos escuchado hablar de Nostradamus y de su percepción de que el mundo acabaría en Diciembre de 2012,según los astros,pero nadie le hizo demasiado caso.Total ,que era el siete de diciembre y un tsunami lleno toda la india de su agua y posterior dolor.A la vez, unos minutos mas tarde, el terremoto que provoco el tsunami había derruido muchos continentes de su alrededor, consecuencia del alto grado del terremoto.Cada vez los acontecimientos extraños duraban menos de uno a otro.Nadie sabía lo que iba a pasar.Así el rey de España ,Juan Carlos I envió un mensaje para tranquilizar a la población.Su mensaje no era nada tranquilizador, no era lo que la población pensabas sus palabras parecían tranquilizar pero su rostro era de total preocupación.Sus palabras no decían lo que su rostro expresaba, al  conocerlo ya de muchos años que estaba reinando por su expresividad era fácil de deducir.Sus palabras explicaban que estos fenómenos eran normales según los estudias, pero su rostro decía que no era nada normal lo que estaba ocurriendo.Con el paso del tiempo, nos olvidamos de este comunicado hasta que el 31 de diciembre la Tierra había temblado provocando un terremoto ,d de tal manera que el eje de la tierra vario mas de 5 grados.Mucha gente murió ya que esto influyo a todo el planeta.Ahora sí, nuestro rey de España dijo en un comunicado urgente interrumpiendo las noticias del medio día de todas las cadenas, que como mucho quedarían 20 minutos de vida en la Tierra.Justo cuando acabó este comunicado, en las noticias dijeron que todos los volcanes del mundo se pusieron en erupción y fue entonces cuando nos creímos todo lo que nuestro dijo sincerándoselo .Yo, y  imagino que toda mi familia que estaba a mi lado , no sabía qué hacer:esperar a mi muerte , cavar un túnel ,coger a mi perro ,estar con toda la familia o esperar a todos los demás… ¿Qué hacer?

En este momento, como todos los días estábamos comiendo y viendo la televisión.Entonces pensé en sentarme en mi butaca amarilla de la sala de estar y esperar a que La Tierra desapareciera.Cogí a mi perro Lucas y pensé en que podía pasar ahora….qué era morir……qué pasaría después…cómo moriría…qué les pasaría a toda mi familia, a los que tanto quiero…que podía pasar… El cielo estaba de color anaranjado, como nunca antes, todo era  terrible, hasta que poco a poco, muy lentamente pero a una velocidad razonable, y sin lugar a  escapar, la casa se desprendió con todos nosotros en su interior…fue lo peor esa sensación…ver como el techo, lentamente se caía encima tuya….¡¡¡RINNNGGGG!!!! Entonces sonó el despertador y dándole gracias a dios durante todo el dia, acudí a mi colegio recordando durante toda la mañanease sueño tan espantoso.Se lo conté a mis amigas y no le dieron la importancia de lo realmente me pasó y de lo mal que lo pase cuando pensaba en la muerte de mi familia.

Resumiendo esta experiencia que espero que haya salido bien y os guste, sólo decir que espero haberle puesto todo el realismo que necesitaba y todos los detalles que precisaba.Personalmente pienso que me ha salido bastante bien y que he puesto todo de mi parte para hacerla todo lo mejor que he podido.

Espero que os haya gustado.

 

¿Qué hacer cuando el mundo se va a acabar y lo sabes? Buah, tengo tantas cosas por hacer todavía que ni siquiera lo sé. Lo primero que haría, sería recoger todo lo que verdaderamente me importa (hablando materialmente) y guardarlo en un baúl, por si se consigue salvar y eso. Siguiente,  le diría a esa persona que tanto me gusta lo que siento,  obtenga la respuesta que obtenga, me habré quitado un peso de encima (porque no veas). Luego iré corriendo a hablar con todos aquellos que de verdad me han hecho sentir bien en esta vida; los que me han ayudado a sonreír cuando estaba mal; los que me han escuchado sin poner una pega, entendiéndome aún sabiendo que no llevaba razón;  a aquellos que ME HAN DICHO LA VERDAD ante todo, aunque me doliese; y sobre todo, a esta maravillosa familia que tengo, a pesar de las malas rachas que tenemos a veces; bueno y eso, que les intentaría convencer para que estuviéramos todos juntos en esos minutos que nos quedaba de vida.

Pero claro… ¿y si el mundo cuando se acabara, volviéramos a nacer otra vez o ni siquiera nos muriéramos? Estaría súper chulo, porque podemos empezar otra vez (si reencarnáramos) o seguir viviendo la nuestra como si no hubiera pasado nada… claro está, que tendríamos que empezar a construirlo todo porque supuestamente se había acabado el mundo y todo estaba destruido… Pero ¿por qué nosotros seguíamos vivos? Bueno eso no importa. Siguiendo con lo de que haría si se acabara el mundo… haber… pues escribiría en un papel todo lo que me hubiera gustado hacer, y también otra carta en la que explico todo lo bueno y lo mejor que me ha pasado en estos años. La verdad, es que me gusta mi vida, sé que muchas veces me he quejado pero es lo normal, tener un mal día y que todo te parezca que se te va a caer encima. Lo típico. Pero hay días en los que verdaderamente doy las gracias por el simple hecho de vivir. Puff pues ya se me han acabado las ideas de que hacer… además, no me daría tiempo a hacer más nada porque solo tenía 20 minutos y yo creo que ya quiero hacer más cosas de las que me daría tiempo… pero ¿y si todo es mentira y alguien se ha inventado que se acababa el mundo, ha presentado argumentos falsos y ha hecho que todos lo creyéramos? ¿y si después de llevar los 20 minutos más estresantes de nuestras vidas todo fuera una falsa y no se acabara el mundo en verdad? Pues yo me cagaría bien en el responsable… aunque pensándolo por una parte sería bueno porque no nos morimos pero por otra… pensar en todo lo que hemos hecho o dejado de hacer por pensar que se terminaba nuestra existencia…ah! Se me olvidaba, NO ME PIENSO MARCHAR DE ESTE MUNDO SIN PISAR LOS ANGELES ANTES. Sola o en compañía. Es mi sueño y pienso luchar por él. Sé que puede sonar muy infantil pero es lo que me gusta y punto. Me encantaría poder vivir en una urbanización de esas americanas con todas las casas en fila y que tienen césped en la puerta y un patio trasero, y la típica canasta de baloncesto en la cochera. Bueno, volviendo al tema, que es mejor que todo siga como está y no se acabe el mundo, porque me gustaría llegar a formar una familia y eso, y que siguiera mi generación. Aunque si se acaba… pues quien sabe, no sabemos si habrá otro Big Bang o si Dios creará otra vez el mudo, si volverá a haber vida en la Tierra o pasará a ser un simple planeta como Mercurio, Venus o cualquiera de esos… ah! Pero si se acaba el mundo, ¿también se destruirá el universo o solo la Tierra? ¿y si desaparece la Vía Láctea? Tantas preguntas sin respuesta. En fin, terminé mi experiencia filosófica, espero que les haya gustado señores, un saludo.

Yo si me quedasen 20 minutos de vida, iria a ver a aquellas personas que son importantes para mi para poder despedirme de ellas y abrazarlas por última vez, ya que no sabemos si una vez muertos hay algo mas allá donde se nos permita estar en contacto con ellas.

SIn embargo, al no tener esa certeza, lo que yo haría (que es mas o menos lo que hago ahora) sería intentar aprovechar al máximo cada momento ,cada experiencia que viva.

Bueno esta experiencia he pensado dividirla en dos partes, por un lado escribiré como me pienso realizar la experiencia y una vez que la haya realizado pues volveré a escribir todas las posibles sensaciones que hallan podido invadir mi cuerpo en esos no se bien si largos o cortos 20 minutos. Si una cosa tengo clara es que todas las experiencias que vaya a hacer me las voy a tomar muy en serio como yo suelo hacer la mayoría de las cosas pues tonterías las justas y ya son muchas. He elegido el domingo como día para esta experiencia puesto que creo que después una larga semana podre darme cuenta de todo lo que quería hacer en esos minutos , que hacer antes , si dejar o no mensaje de despedida en fin todo eso . Así que el domingo será mi día y la hare después de comer ya por la tarde cuando mi casa este tranquila y yo relajada. Primero voy a buscar un reloj que tengo en el cual la hora se refleja en el techo y de este modo ir viendo como pasa el tiempo. Después bajare la persiana, cerrare la puerta y me tumbare en mi cama todo a oscuras y yo mirando hacia el techo. Tomare mi teléfono y pensare un mensaje que dejar a aquellas personas que de verdad me importan o dejar uno para todo el mundo, ya veré en el momento. Dejare el móvil en modo vibración para ver cuando gente de mi alrededor realimente se ha creído lo que he dicho y por lo tanto me habrá enviado un mensaje aunque sea diciéndome que estoy mal de la cabeza. Esperare a que de una hora exacta y me pondré a esperar. Y hasta aquí la primera parte. Cuando llegue el domingo y tenga ya hecha mi experiencia os seguiré contando como me ha ido. Bueno señores ya he hecho mi experiencia… que sensación más rara. Como resulto de que mi hermano no estaba muy tranquilo y sabia que entraría a mi cuarto por cualquier tipo de razón cual mas inútil, decidí escribir en un posita y pegármelo en la mano. Puse: el mundo se acaba en 20 minutos ten mucho cuidado y aprovecha lo poco que queda, no me interrumpas estoy en pleno experimento. Efectivamente no me equivoque mira que lo sabia. Entro a mi cuarto y se quedo callado puso cara de tengo una hermana que no esta bien de la cabeza o será la persona que le haya dicho que haga esto la que no esta bien de la cabeza no lo se. Yo volví a cerrar mis ojos y mi hermano se fue. En ese momento se me pasaron por la mente una gran cantidad de cosas y la verdad sea dicha que yo me creía que iba a estar mas inquieta y todo lo contrario. Yo continuaba mirando hacia arriba la hora. Los minutos pasan muy lentos y supuse que seria porque no estaba haciendo nada más que pensar. Se me ha olvidado deciros que escribí un mensaje de la gran noticia para ver que reacción tendría la gente y tal como pensé el móvil empezó a vibrar. Mi mente únicamente pensaba en todo lo que hubiera querido hacer o decirle a mi familia y amigos y también como decirles que el mundo se acaba en menos de media hora para que no me tomasen como una chalada. Habían pasado unos diez minutos sino recuerdo mal y caí en la cuenta de que había perdido mucho tiempo de mi vida esperando cosas de resto de personas , que si me hablen que si me llamen … Me di cuenta de que tenemos que hacer las cosas por nosotros mismo y no esperar nada de nadie porque si a gente estuviera esperando a que el mundo se acabase en 20 minutos para poder decirme todo lo que he significado para ellos , perdería toda su gracia por lo menos para mi puesto que me quería enterar antes por lo que podría haber pasado una vez sabiéndolo. Total que ya mi cabeza pensaba en millones de cosas hasta en donde me iba a ir cuando el mundo acabase. Al terminar habían sido tres las personas me habían dicho loca y dos que estaba haciendo con mi vida. Otros tres se preocuparon por mi y por como estaba. 

Minuto 20:
¡El mundo va a acabarse! No puede ser, ¿así de repente? Todo el mundo está diciéndolo, comentándolo, y la gente está entrando en pánico. Se les ve correr hacia distintos lugares, a otros llorar sin remedio, y otros, tranquilamente paseando por la calle, contemplando todo. Prefieren relajarse cuando su hora les llegue.
¿Qué hago? Tengo tantas cosas por hacer…
Minuto 19:
Corre, corre, tienes que despedirte de la gente. ¿Para qué, si todos vais a morir? ¡Nadie va a recordar nada! Es igual, tienes que hacerle saber a la gente que aprecias que le quieres. Tienes que soltar todo de sopetón. Te aguantas, por no haberlo hecho antes. Ese es el precio de los errores.
Minuto 18:
Te despides de tu familia, entre lágrimas, le dices lo mucho que los quieres, les dedicas miles de palabras cariñosas, les das besos, abrazos. No quieres separarte de ellos, ¿por qué tienes que hacerlo? ¿Por qué ahora? Es injusto, todos lo sabemos. Los quieres, ¿verdad? ¿No deberían de haberlo sabido antes, y no ahora, que ya es tarde?
Minuto 14:
También te despides de tus amigas más cercanas, pues son las que te da tiempo de despedirte. No tienes tiempo de ir a por tus amigas que viven lejos, perderías todo el tiempo que te queda, y a saber si están allí, o no están como locas al igual que mucha gente. Te despides, por lo pronto de tus amigas más cercanas, tus vecinas. También las quieres, y ahora te das cuenta que hubiese gustado tener más momentos con ellas, salidas, etcétera. Te despides rápidamente, pues tienes muchas cosas que hacer todavía. El tiempo es oro, y nunca mejor dicho.
Minuto 11:
Corre, que no te da tiempo a llegar. ¿De verdad crees que en unos minutos vas a hacer un recorrido en el que en coche tardas quince, y en autobús una hora? Da igual, tienes que darlo todo. Tienes que poner hasta el último aliento en ese esfuerzo, y llegar a tu límite. Es el momento de demostrar que lo que quieres, puedes conseguirlo. Vamos, tú puedes. Tienes que llegar. Sigue corriendo. Te queda poco.
Minuto 6:
Has tardado cinco minutos en encontrarlo, gracias a la suerte, pues os habéis cruzado por el camino. Está claro que los dos os queríais ver. Él iba a tu casa, y tú a la suya, ambos a despediros, a decir un adiós que ninguno quiere, pero que estáis obligados a decir. ¿Qué vais a hacer? ¡Que se acaba el mundo!
Dile lo mucho que lo amas, vamos, has tenido mucho tiempo pero ahora solo te quedan seis minutos, y tienes que decirle todo. ¡Qué agobio, no tienes tiempo para nada! Te gustaría tener todo el tiempo del mundo para decírselo una y otra vez.
Se lo dices, lo abrazas fuertemente, le pides perdón y él a ti por las peleas tontas, lo besas, le dices que lo amas, muchísimo, y que no quieres que el mundo acabe. Pero por lástima, va a acabar.
Os despedís.
Minuto 2:
¿Qué hacéis? Ya no os da tiempo a reuniros con vuestra familia para morir junto a ellos. Son solo dos minutos. Todo va a acabar. Os quedáis abrazados, entre lágrimas y besos que desearíais que no acabaran nunca.
Minuto 1:
Os miráis, asustados. Empieza la cuenta atrás. Las lágrimas bañan vuestros rostros, y el pánico os aterroriza. Os han quedado tantas cosas sin hacer… creíais tener una vida eterna por delante, y habéis ido aplazando las cosas para otro día, creyendo poder hacerlas, pero ahora… te das cuenta de que no vas a poder nunca. ¿Te has dado cuenta de todas las cosas que te has dejado sin hacer en la vida? ¿De todos los te quiero y te amo que te han faltado por decir? ¿Sí, estás segura? ¿Te das cuenta de que has desperdiciado el tiempo? ¿Sí, de verdad?
Minuto 0:
Relájate. Míralo, abrázalo y bésalo, repítele que le amas, quédate tranquila, te queda mucho tiempo a su lado. Vuelve con tu familia y haz lo mismo.
Tan solo era una prueba, el mundo no va a acabarse todavía. Y ahora que has aprendido la lección… no vuelvas a equivocarte.

Esta experiencia al principio no la comprendía muy bien, pero después de haber estado dándole vueltas y pensando durante un largo rato, creo que ya he logrado comprenderlo en su totalidad. Hacer que el mundo dure unos 20 minutos quiere decir desde mi punto de vista y conocimiento, hacer lo que haríamos si ahora mismo el mundo se acabase en 20 minutos, es decir, hacer todo lo que queremos hacer si en este corto período de tiempo se acabase el mundo. Esta experiencia la he probado hace poco, y en primer lugar sientes como una ansiedad y unas ganas locas, que en muchos de los casos, nos impide hacer lo que queremos hacer realmente, es decir, que los nervios y el miedo, que tiene que ser dominado por la persona, es controlado en ese momento, no por la persona, sino que ese cerebro domina esos dos aspectos, y esos aspectos paralizan, por decirlo de alguna manera a esa persona, y le impide hacer lo que quiere durante ese período de tiempo. En 20 minutos no es que nos dé mucho tiempo a realizar todo lo que queremos hacer antes de que el tiempo se acabe, es decir, que no realizamos ni la octava parte de todas las cosas que deseamos realizar, ya que si el mundo se acabase en el período de tan solo 20 minutos, quedarían muchas cosas que no se podrían completar ni realizar: Estar con toda la familia, jugar al fútbol, salir con los amigos, jugar a la consola, pasear a mi perro, comer todo lo que me gusta..  entre otras muchas cosas. Por lo que quiero decir que habría que escoger lo que sea más importante para esa persona durante ese período de tiempo, yo he probado esta experiencia, y por mi parte, no me gustaría experimentar ni una vez más esta experiencia, ya que lo que vives es una sensación que no le puede venir bien a ninguna persona, esa situación, es decir, las circunstancias te pueden y te paralizan cuerpo y mente, de manera que te quedas en un estado en el que la persona, no tiene la capacidad necesaria para tomar decisiones, ya que el estrés y la ansiedad es el mando que maneja a la propia persona. De esta manera cabe destacar de todo esto una gran lección que se desprende, que cuando falta poco tiempo para que la vida en el mundo acabe definitivamente, la persona le da una mayor importancia o trascendencia a situaciones que, en un primer momento nos parecen aburridas o repetitivas, pero luego se echa de menos cuando sabes que no volverás a hacerla esa tarea otra vez en tu vida… Entonces en ese momento le das la importancia que nunca les había dado anteriormente. En esta experiencia se cumple el refrán:”no sabes lo que tienes hasta que lo has perdido”, o en algunos casos no tienes ni que perderlo, con estar cerca de perder algo, como un familiar, por ejemplo, después de esa experiencia negativa le das más importancia y cariño a esa persona de lo que le dabas antes, en esta experiencia he aprendido sobre todo a valorar lo que tengo y a cuidarlo, ha cambiado en gran parte la visión que tengo sobre las cosas que tengo, ahora le doy más importancia y más cariño que el que le daba antes de probar esta experiencia.  Le aconsejo a otras personas como yo que prueben esta experiencia, que al principio es un poco difícil pero luego comprenderás la importancia que tiene que es mucha. El simple hecho de haber hecho esta experiencia, me ha sido bastante útil para valorar lo que me rodea y es más trascendente de lo que me podía imaginar, me ha cambiado en definitiva, la visión que yo poseía de la realidad, y me ha modificado en una parte  mi manera de ser. Por último cabe destacar que recomiendo que la probéis para saber lo que es.

debes realizarla y saber lo que es, probarlo para saber lo que realmente significa la realización de esta experiencia.Esta experiencia te aportará mucho

 Hacer que el mundo dure 20 minutos.

Bueno, teniendo en cuenta que estoy escribiendo esta experiencia a altas horas de la mañana y un poco medio dormido/a, vamos a intentar hacer que el mundo dure 20 minutos. Lo primero es que si el mundo durase 20 minutos me gustaría saberlo para así poder organizarme y poder hacer lo que quisiera esos últimos minutos de vida que me quedasen.

En el caso de que me dijeran que el mundo se acaba dentro de poco más de un cuarto de hora, seguramente me pondría histérico/a, no sabría qué hacer, ni dónde ir, ni si quiera a quién acudir. Por esta razón, me prepararía una lista de cosas que podría hacer en poco tiempo antes de que el mundo desapareciese definitivamente y nosotros con él. También sé que ahora que me han planteado esta pregunta voy a tener preparadas varias cartas en las que si en un posible caso, el peor que podría darse, se fuera a dar una catástrofe de esta magnitud,  yo tendría más o menos un esquema, que no sé si seguiría en el momento dado, para quizás guiarme durante esos 20 memorables minutos que me quedarían de vida a mí y al resto de personas que vivimos en el planeta Tierra. Si supiera antes que nadie y de mí dependiera que el resto de mi familia se enterase de que ya se acaba todo lo que nos rodea, se lo diría y no se lo diría; es decir, tengo motivos por los que sé que decírselo podría ser bueno para todos y motivos que me aterran y por os que no me gustaría contarle nada a mis padres, etc.

Los motivos por los que sí contaría a mi familia y amigos más cercanos, que son con los que más me complacerían estar los últimos minutos de mi vida, son:

  • Una de las ventajas de que mis padres supiesen que van a morir en escasamente una media hora mal contada y que sus hijos no se salvarían de esa tragedia sería que podría pasar ese tiempo con ellos, quizás no nos sulfuraría el saberlo, sino que nos podría proporcionar una cierta paz interior. Pero lo mejor de todo, aunque sea dentro de todo lo malo, por no decir de lo peor, sería que perecería junto con las personas más importantes en mi vida y que posiblemente sean las que más me hayan querido más en su toda vida; lo más seguro es que acabaría abrazado/a a mis padres, diciéndoles cuánto lo quiero, gracias por todo y seguramente tendría alguna esperanza puesta en no sé qué, pero la tendría para que de una forma u otra pudiera creer que todo era una mentira, un simple engaño.

Los motivos por los que no les diría a mis padres que en mundo iba a desaparecer serían:

  • Lo primero, en el hipotético caso de que me creyesen, no se lo diría porque temería por su reacción. Al contrario que lo mencionado anteriormente, es decir, que la reacción de mis padres podría no ser desesperanzadora, podrían caer en una especie de depresión, traumatizarse, etc. sobre todo los miembros más pequeños de la familia que seguramente se pondrían a llorar, poniéndonos a todos en una situación muy delicada, en la que cualquier paso mal dado podría causar consecuencias peores.

Dejando atrás las consecuencias positivas o negativas que podría causar a mi familia o amigos al decírselo, continúo con la lista que confeccionaría. Principalmente me despediría de mi familia y amigos y el resto del tiempo que me quedase lo emplearía en escuchar música. Sí suena un poco extraño o quizás no tanto, pero si escuchase mis canciones favoritas me relajaría hasta tal punto que me olvidaría de todo, hasta de la misma cuestión que se me ha planteado y del suceso que podría o no asaltarnos.

 En conclusión, la verdad es que no sabría si decirle a mi familia y amigos que el mundo se acabaría en 20 minutos, pero supongo que en el momento sabría qué debería hacer.

¿Hacer que el mundo dure 20 minutos? Una locura, muy loca en realidad, ¿cómo va a acabarse el mundo de aquí a 20 minutos? Bueno aunque sea una locura, y eso era lo que pensaba antes de hacer esta experiencia, lo hice y bueno mis sensaciones fuero muy diversas, muy... muy raras, todo era muy raro, a continuación lo contaré:

Empecé por sentarme en mi cama con la idea de imaginarme que en 20 minutos habría un explosión o algo parecido que haría que el mundo tal y como lo conocemos desaparecería. El primer y el segundo minuto pasaron muy bien la verdad no me lo creía mucho, pero a partir de ahí empezó a venir a mi memoria muchas cosas, muchos recuerdos, mucha tristeza de pensar que el mundo se iba a acabar y yo estaba encerrada en mi cuarto sin poder hacer nada. Y empecé a desesperarme de una manera tan impresionante que empecé a creerme de verdad que el mundo se iba a acabar, y empecé a pensar en las cosas, en cosas muy específicas, en mis amigos por ejemplo, pero no esos que dicen ser amigos, si no esos que son amigos de verdad, esos que están ahí siempre y que además de decírtelo te lo demuestran día a día, que aguantan tus cambios de humor propios de la edad esta en la que estamos ahora, que están en las buenas y en las malas, lo que se dice amigos de verdad. Luego en mis padres, que sin duda son lo mejor que tengo, mis mejores amigos, de los que estoy muy orgullosa y muy contenta de la familia que me ha tocado, porque yo sé que nuestra relación no es como la de cualquier familia. Por ejemplo mi madre y yo somos cono las mejores amigas que hay y eso es porque sé que es el mejor apoyo que voy a poder tener ya que ella siempre va a querer lo mejor para mí. Luego me acordé de las personas que no están aquí y con las que me gustaría muchas veces estar y pasar un rato de charla y recibir una abrazo pero por desgracia eso es prácticamente imposible y mirando por otro lado si el mundo se acababa cuando el tiempo de 20 minutos se terminara podría reunirme con ellos si es que hay algo después de morir.

Además a mi cabeza vinieron muchos recuerdos, el primero fue el día que entramos al colegio, a 1º de primaria, con todos mis compañeros, el día de mi comunión con mi familia y el regalo tan maravilloso que me dieron (un viaje a Euro Disney), el primer beso, la primera vez que lloré por alguien..., demasiadas cosas en el poco tiempo de vida que llevo.

Y al pensar en todo eso, tuve mucha tristeza de tener que abandonar tan pronto el mundo, que todos tuvieras que abandonar el mundo tan pronto, que todas las personas queridas se tuvieran que morir y que yo sabiéndolo siguiera ahí en mi cuarto encerrada sin poder hacer nada por salvarlos. Mis sentimientos eran de impotencia porque yo no podía hacer nada y el mundo se iba a ir, y aún me quedaban muchas cosas por hacer de mi lista de cosas que hacer antes de morir, y en 20 minutos no se pueden hacer tantas cosas.

Los últimos minutos fueron de angustia, de pensar que esto se acababa ya, que yo no podía hacer nada y que todo el mundo iba a morir cuando la alarma del reloj que había puesto para contar el tiempo sonara. La angustia fue tal que me levanté, comencé a andar muy desesperada por toda la habitación y di mil vueltas por todos lados. Finalmente, la alarma sonó y el mundo no se acabó.

Esta es una de las experiencias que más me ha costado hacer porque era muy difícil imaginar que cuando pasaran 20 minutos el mundo se iba a acabar pero me ha servido para reflexionar mucho y pensar muchas cosas que hasta ahora no había pensado.

En esta experiencia me he inventado un tema, que no es tan inventado, porque es lo que yo haría. Es tan falso que hay veces que te emocionas y te crees que es cierto, voy a empezar con lo que haría yo en veinte minutos, espero que os guste y que deis vuestra opinion sobre como lo hariais vosotros.Bueno esta experiencia, se que es algo irreal, lo cual todo depende de dejarse llevar por la imaginación. Si yo tubiera que hacer que el mundo durara veinte minutos seria, un deseo irreal. Porque seria querer ser Dios y eso es imposible en la condicion humana en la que vivimos. Si yo tubiera que hacer que el mundo durase veinte minutos lo haria todo perfecto, un mundo, lugar, momentos, en el que no existiera es sufrimiento, pero hay un inconveniente, y es que sin el sufrimiento no puede haber vida. En ese caso me repartiría el tiempo, de cinco en cinco minutos cada cinco minutos viviria sensaciones especiales. En los primeros diez minutos, daria al mundo sufrimiento, para que posteriormente puedan esperimentar el ser feliz sin ningun tipo de sufrimiento, daria a las madres la perdidad de sus hijos en un lugar, en el que no pudieran encontrarlos, todo eso en cinco minutos en el minuto cinco conma cero uno las llevaria a el lugar donde estuviesen ellos, para que experimentaran el alibio y que no hay ningun sufrimiento mayor que el perder a sus hijos, les daria la felicidad al maximo, les haria olvidar todo lo ocurrido anteriormente y les daria a elgegir lo que de verdad quieren realizar en su vida, y que por unas circunstancias no lo han podido hacer, eso seria en el minuto quince. Les dejaria hasta el minuto dieciocho, y en los dos minutos que quedan reuniria a todo el mundo y le preguntaria si han disfrutado de esos casi veinte minutos , la respuesta seria  claramente que si, y estoy segurisimo que yo tambien hubiera dicho, pero gritando que si, es algo que yo nunca hubiera podido realizar, y es lo que deseo en esta vida al menos solo por una vez. Despues de tomar la experiencia realizada por todo el mundo, tristemente les diria que nos quedan segundos para morir, me hubiera gustado a mi eso sinceramente, porque si siguieramos con vida no mereceria la pena disfrutar de cosas que sabes que no puedes realizar en la vida, y que sabes que seria imposible de realizar en tu vida. En ese ultimo minuto que faltara para llegar a los veinte les diria que van a morir todos que vamos a morir todos, que he hecho lo que vosotros queriais para que podais disfrutar, de cosas que era impensable disfrutar en vuestras vidads. Ya muertos no sentimos nada, no hay existencia de nada o sufrimos nada, no sentimos, nada. Solo quedara un recuerdo que los ultimos veinte minutos de tu vida los has pasado como tu querias, como tu has elegido.

No si hay gente que piense como yo, cada uno lo haría de una manera diferente, la mia es esa, es la mejor manera de hacerlo. Algunos me lo agradecerian, otros me juzgarian, aunque no se como si ya estamos todos muertos. No quedaria ni en un recuerdo solo en algo vivido y pasajero que no sabemos que ha ocurrido, para mi seria lo mejor, aunque claro esta que en mi quedaria , solo se lo contaria a gente en la que mucho confiaria.

Al igual que otra experiencia es todo imaginacion, se perfectamente que esto no iba a ocurrir, mas que nada porque no me hubiera gustado, aunque no estoy muy seguro de lo que digo, todo esto tendria su logica, de saber que si lo haria asi causaria sufrimietno y alegria para unos y para otros, todo depende del deseo de cada uno , si una persona quiere aprovechar algo que sabe que nunca ocurriria con una persona y esa otroa persona no le gusta seria, algo que no mereceria la pena, por eso no se como lo haría, no lo se lo tengo en duda.

 

 

Esta experiencia la he elegido porque que ¿pasaría si realmente se acabara el mundo en 20 minutos? ¿Si todo lo vivido fuese solamente un sueño? ¿Fuera fruto de nuestra imaginación y nada de lo vivido es real? Se me pone la piel de gallina solo el pensarlo, pero es que realmente no lo sabemos, y quien sabe si todo es mentira y es solo un juego en el que la vida es el tablero y nosotros los jugadores, no quiero ni pensarlo, pero es que nada se sabe ¿o si? Esperar sentada durante 20 minutos que te quedan de vida y esperar a morir, es una experiencia realmente dura y desagradable, porque es como una inquietud y una sensación de querer y no poder, porque tienes que quedarte quieta sin hacer nada, solo dentro de 20 minutos te vas a morir porque el mundo se va a acabar en 20 minutos, entonces es como que quieres irte y disfrutar de esos 20 minutos que te quedan, pero no puedes tienes solo que imaginar que hubieses hecho, tus arrepentimientos, todo y solo tienes 20 minutos para hacerlo. ¿Qué hacer? ¿Qué pensar? ¿De qué arrepentirse? Muchas cosas son las que se nos vienen a la cabeza en ese momento. En el momento de la experiencia, aunque sabes que solo es una experiencia te sientes nerviosa, aún sabiendo que no pasará nada, pero te centras tanto y te metes tanto en la experiencia que llegas a creértela. Empiezas a contar el tiempo, y en ese momento los nervios se ponen a flor de piel, quieres avisar a tus familiares y despedirte de ellos, quieres estar junto a tus amigos, quieres vivir la última fiesta de tu vida, quieres tener todas las cosas que querías conseguir a lo largo de tu vida, pero miras el reloj y el solo el pensar que te quedan 19 minutos para morir, piensas que quizás estás perdiendo el tiempo y que lo que deberías hacer es hacerlo, pero solo tienes 20 minutos para hacer todo eso, incluso piensas que estás perdiendo el tiempo haciendo la experiencia y escribiendo estas palabras en tu ordenador, o a lo mejor no. En 20 minutos se pueden hacer muchas cosas pero a la vez pocas, haría cosas que por vergüenza, por miedo, por rechazo no había hecho anteriormente. Cogería mi móvil y empezaría ha hablar con todos mis contactos, a despedirme de ellos. Quizás incluso a esa persona que nunca me he atrevido ha decirle te quiero, se lo diría, o no, porque ¿y si no termina en estos minutos el mundo? Y si sigues viviendo después y él ya lo ha leído ese mensaje, me moriría de miedo y vergüenza, pero lo haría. Todos decimos que nos iríamos de fiesta por ahí, que nos emborracharíamos, pero en verdad no es así, yo creo que la mayoría le gustaría pasarlo junto a su familia, no toda claro porque solo tienes 20 minutos, pero si con los más imprescindibles, con los más importantes para mí. Por supuesto también con mis amigos, pero sobre todo con los que me han apoyado siempre y han estado ahí conmigo, en los buenos y malos momentos. Disfrutaría al máximo esos minutos que me quedan junto a ellos, intentaría sacar las mejores y máximas sonrisas posibles y ser lo más feliz que se pueda, cantar, reír, saltar , y ser feliz en general, no desaprovecharlo aún sabiendo que me queda poco. Les daría las gracias a todos por haberme soportado a lo largo de la vida. Mis amigos más íntimos, puf, sería un momento muy emotivo porque no quiero perderles ni a mi familia tampoco, quiero seguir viéndoles, seguir disfrutando con ellos, reír con ellos y agradecerles de nuevo por todo. Esta experiencia es una de las que más me ha costado porque no me lo podía imaginar, y no me llegaban inspiraciones, no sabía por donde empezar, porque mi vida se acababa en 20 minutos.

¿QUE PASARIA SI EL MUNDO  SE ACABASE EN 20 DIAS?

Si el mundo se acabase no me sentiría contento. La verdad es que he hecho un montón de cosas de las que me arrepiento continuamente, pues son recuerdos que siempre recordare hasta el último minuto de la existencia del mundo. Si pudiera decidir sobre la existencia del mundo, o por lo menos saber que se va a acabar el mundo, seguramente no sabría como reaccionar. Todos decimos que sabemos lo que vamos a hacer, pero llegado el momento de la verdad no se como reaccionaria. Seguramente no haría nada del otro mundo, y me quedaría en familia y refugiándome en el amor de los míos. También visitaría a mis amigos para despedirme de ellos. Pensaría en todo lo que he hecho y lo que me dejo en este mundo sin hacer. Estas serian las palabras lógicas de cualquier persona medianamente cuerda, así que no es mi caso. Yo sinceramente me gustaría morir comportándome como no me he atrevido a hacerlo nunca. Mi existencia no supondrá nada en la vida de ciertas personas, pero será muy influyente en la vida de los que si conozco. Tiene gracia: nacemos para morir (que sentido tieneJ). Mi reacción seria algo diferente, ya que me gustaría que en mi muerte me recordaran tal y como era, pero sabiendo que soy yo. Muchos de mis lectores (no creo que sean muchos jejejeJ), creerán que no soy una persona muy complicada. Todos aquellos que pensáis así estáis equivocados. Mi reacción seria “despedirme de todos, pero diciéndoles que no les volveré a ver. Hacer todas las cosas que pueda hacer en el corto periodo de tiempo, las cuales no he podido hacer en mi vida. Después me iría lejos y escribiría mis memorias, junto con mis reflexiones y mis mas sinceros sentimientos hacia ciertas personas (mi padre, mi madre, aunque me cueste mi hermano, mis abuelos, mis amores,…J) enceraría mis confesiones en una caja y la enterraría por si acaso alguien puede leerlas en un futuro (si es que entiende mis cartas)

Me alejaría lo mas que pudiese y realizaría mi ultima voluntad: vivir. Esta asignatura siempre me ha quedado pendiente para septiembre. Por ello descargare todas mis frustraciones destrozando todo aquello que me encontrase por el camino. Me arrepiento de todo lo que he hecho, pero no me da reparo en reconocerlo. Una vez me haya librado de todas estas ataduras volvería con mi familia a morir con ellos. Pasar el tiempo como uno quiere es la felicidad en si misma. Como yo he digo  “la felicidad solo es lo que uno espera positivo de la vida, y no todo lo que se aspira para conseguir lo que otros llaman felicidad”. Como he explicado en otra de estas cartas que nuestro profe nos ha mandado, la muerte no es nada. Cierto es que da miedo, pues no conocemos lo que hay después, si es que hay algo.

Tal vez parezca (como ya he dicho en otras cartas del “capitán trueno”J) que me da igual todo, y la verdad es que es así. No soy una persona que se sincere con facilidad (nadie de mi instituto me conoce con pelos y señales) y eso es un punto de desventaja. Soy una persona con un gran interior, pero soy más bruto que una infusión de pan rallado. Otro punto de mi es que la felicidad en mi se manifiesta cuando me rio, o cuando veo que soy importante para alguien. Puede que no sea muy sociable, pero desconfió del mundo y es por eso que me daría igual que este maldito mundo (donde las personas como yo intentamos conseguir la felicidad), lleno de corrupción se acabase. Como aun me quedan palabras por escribir, debo darle las gracias (pero cuantas veces habéis oído eso en uno de mis textos) a mi profe, el mismo que me ha hecho reflexionar sobre todo lo que es este mundo

RSS

Fotos

  • Añadir fotos
  • Ver todos

FILOSOFIESTA MÓVIL

Miembros

© 2024   Creado por Fernando López Acosta.   Tecnología de

Emblemas  |  Reportar un problema  |  Términos de servicio